Cristiano: De Balón de Oro a Balón de Trapo

Joan Tubau

Su corte mediática celestial le echará la culpa a su estado físico -¿si no está bien por qué juega?- para justificar la patética imagen que Cristiano Ronaldo está dando en el que tenía que ser "su" Mundial. A los 29 años, ya no puede esperar otra oportunidad para intentar aspirar al trono de mejor futbolista mundial.

Lo cierto es que la vedette del Real Madrid está arrastrando a Portugal al desastre. Sólo un milagro permitiría a la selección lusa seguir adelante. Y si Alemania y Estados Unidos se ponen de acuerdo y empatan, ni siquiera habrá espacio para el milagro. Cristiano Ronaldo acudió a este Mundial con la clara intención de convertirse en su protagonistra principal, y ahora se encuentra haciendo cola en el pelotón de los fracasados. De hecho, es el único futbolista de los grandes -al menos en cuenta corriente- que todavia no ha sido capaz de ver puerta. Ya han marcado Messi, Neymar, Luis Suárez, Balottelli, Rooney, Van Persie, Robben, Thomas Muller, Benzema... Todos menos él. Se le ha mojado la pólvora y el marketing no lo puede solucionar.