El Barça sale vivo de la ratonera de los insultos (0-3)

Fede Peris Todavía quedaban diez minutos de juego y el Barça ya tenía resuelto el partido. Las gradas de Cornellà presentaban un estado lamentable. Apenas quedaba media entrada cubierta. Los que habían ido a insultar al Barça decidieron marcharse con la satisfacción del deber cumplido insultando durante 80 minutos a los odiados jugadores del líder de LaLiga. No vieron cómo Luis Suárez anotaba el 0-3 en el minuto 85. Antes el propio Suárez y Rakitic habían anotado los otros dos goles. El Barça salió vivo de la ratonera de Cornellà y respondió con tres goles a las groserías que salieron de la grada. El Barça ha sido dueño y señor de la situación durante los 90 minutos, aunque en los primeros compases se ha visto sorprendido por un Espanyol muy ordenado en la primera mitad que ya en el minuto 4 ha disfrutado de una clara ocasión a través de Jurado, solo ante Ter Stegen, que ha enviado el balón fuera. El Barça ha tenido problemas para encontrar espacios por donde penetrar y ha tirado de un Neymar muy activo para tratar de sorprender a la defensa perica. Messi, apagado, apenas ha mostrado tres detalles en este primer periodo, pero los tres pudieron acabar en gol. El Barça dominaba y el Espanyol se defendía con orden y, todo hay que decirlo, con una agresividad que el colegiado Undiano Mallenco ha permitido, lo que ha dificultado el juego del Barça con las constantes interrupciones del juego, debido a las faltas españolistas que Undiano no se ha atrevido a castigar con tarjeta.

La ratonera de Cornellà

La ratonera de Cornellà era una olla a presión: el  "Puta, Barça, puta Barça", coreado por decenas de miles de gargantas ha sido la música de fondo del partido. Por supuesto que ni la Federación, ni la LFP ni la Comisión Antiviolencia verán en ello causa suficiente para actuar de oficio, dado que el colegiado, naturalmente, no lo ha reflejado en el acta.  Están entretenidos abriendo expedientes a Piqué y sancionando con tres partidos a Neymar por aplaudir. Hoy el Espanyol debió haber acabado el partido con siete jugadores si Undiano hubiera puesto orden en el terreno de juego, pero está la Liga en juego y a la competición de Javier Tebas ya le iba bien que los jugadores del Espanyol se comportaran como hienas ante el gran enemigo del Real Madrid.   Al dominio del Barça le ha faltado continuidad en la primera parte, se ha echado en falta en el Barça más consistencia en su juego. Aproximaciones han habido muchas en la primera mitad, pero apenas se registró un disparo a puerta, un cabezazo de Sergi Roberto que salió fuera por poco.

Aparece Messi y se rompe el partido

Pero el escenario ha cambiado radicalmente en la segunda mitad. En el minuto 49 Luis Suárez ha acabado con la racha de cinco partidos sin ver puerta anotando el 0-1 al aprovechar un regalo inmenso de Jurado. Y el partido se ha acabado ahí. Messi, apagado en la primera mitad, ha resurgido y se ha convertido en el gran protagonista del partido, con caños, asistencias, disparos y regates que confirman el excelente momento de forma en el que se encuentra. Hoy bien secundado por Neymar por la izquierda, y con Luis Suárez abriendo espacios por el centro, ha inventado una jugada magistral en el minuto 74 en la que ha dejado el balón muerto en los pies de Rakitic, que ha cruzado por bajo a Diego López y ha subido el 0-2 al marcador. Los últimos partidos partidos se han convertido en un baile en toda regla del Barça al Espanyol, los hombres de Luis Enrique se gustaban en un territorio hostil y hasta Piqué se ha permitido un par de frivolidades. Se veía más cerca el 0-3 que el 1-2 y el tercero del Barça ya llegado en el minuto 85 gracias a otro regalo de la defensa del Espanyol que Luis Suárez tampoco ha perdonado. Cornellà, el Bernabéu pequeñito, ha intentado asustar al Barça con insultos y groserías para hacerle un favor al Real Madrid. Pero el líder ha sido demasiado rival para tan poco Espanyol. El Barça ha salido vivo de la encerrona de Cornellà y se mantiene firme en el liderato de LaLiga después del que se supone era el partido más difícil que le restaba en la competición.

Ficha técnica

Espanyol, 0 - FC Barcelona, 3