El Real Madrid cierra la temporada con una victoria cómoda (4-2)

Como protagonista en la sombra, el aún técnico blanco quiso seguir dando la nota y tras dejar a la gran mayoría de los titulares en la grada saltó al terreno de juego una vez iniciado el partido. Provocó tal revuelo con los fotógrafos que Pérez Lasa se vio obligado a parar por unos segundos el encuentro.

Los primeros 30 minutos estuvieron protagonizados por Jesús Fernández. El portero del Castilla que debutaba como titular desbarató las llegadas rojillas si bien los delanteros de Osasuna no destacaron por su puntería. El Madrid estaba roto, sin velocidad ni la posesión de la pelota, pero con la calidad que tienen jugadores como Özil, Modric y el resto de la delantera, dos arreones sirvieron para colocar el 2-0 en el luminoso.

Higuaín marcó quién sabe si su último gol con la camiseta blanca en un mano a mano con Riesgo ante la pasividad de los defensas y cuatro minutos después era Essien, con dedicatoria a Mou, quien de cabeza lograba el segundo tras botar un saque de esquina Özil. Antes de volver a Londres, el jugador ghanés intentó dejar su huella con lucha en el centro del campo y hasta alguna jugada de calidad.

La segunda parte comenzó como la primera pero en esta ocasión Osasuna tuvo más acierto. Roberto Torres con un tiro desde fuera del área y Cejudo de cabeza igualaron el partido para enfado de Jesús e indiferencia de la grada. Como el púgil que sabe que llegará su momento y logrará el ko técnico, el Madrid no necesitó mucho tiempo y en el minuto 69 el francés Benzema adelantaba a los blancos a pase de Özil (segunda asistencia del alemán).

Mesut y Modric ponían la pizca de voluntad y cordura en un equipo que jugaba sin ganas de hacer mucho daño a un Osasuna indolente. Callejón cerró el encuentro con un gol en el minuto 87 tras una contra dirigida por Gonzalo Higuaín, que cedió la pelota a Benzema y éste al canterano blanco que batió a Ricardo de un tiro cruzado.

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