JM Batlle - Goleada de Rosell a Laporta

ASI DE CLARO. Ganó Rosell y ganó el Barça, así de claro. Es muy positivo para el club que el nuevo presidente haya sido elegido por una amplísima mayoría de votos. Es la forma de evitar divisiones y oposiciones que no harían ningún favor al club.

Ganó Rosell y ganó el Barça, así de claro. No en vano, el barcelonismo se ha unido en torno a la figura del nuevo presidente y ha puesto a cada uno en su sitio. Rosell tiene todo el apoyo social para dirigir a la entidad desde la estabilidad. Máxima confianza en su persona y en su equipo. Se la ha ganado desde el día que abandonó a Laporta y decidió erigirse en alternativa a un modo de gobernar que iba perdiendo adeptos día a día, minuto a minuto, a medida que las formas y actitudes del presidente se alejaban de los éxitos del equipo.

Ganó Rosell y perdió Laporta, así de claro. Y por goleada. El socio ha visto en la persona de Sandro la coherencia, humildad, altruismo y credibilidad que veía en Laporta (y también en Rosell) en el 2003. Laporta le falló en el ejercicio del poder y se ha abrazado a Rosell como reserva espiritual de los auténticos valores del barcelonismo.

Ganó Rosell, ganó el Barça y perdió Laporta, así de claro. Las urnas confirman que el laportismo, sin Laporta, no existe y que nadie ha creído en el pseudocontinuismo de Ingla/Soriano. El relativo éxito de Benedito es el peor castigo para ambos.

Ganó Rosell y ganó el Barça, así de claro.