El madridismo descubre en el Bernabéu que su orgullo es Pepe

Fede Peris La pancarta exhibida por la afición colchonera en el último derbi del Calderón era suficientemente explícita: "Orgullosos de no ser como vosotros". Se refería a la afición del Real Madrid y su concepto de valores y señorío, supeditado a ganar a cualquier precio y como sea. A sumar títulos aunque estén bajo sospecha. . Pero ¿qué es lo que diferencia al Atlético del Real Madrid que tan feliz hace a los aficionados rojiblancos? El propio Bernabéu nos dio ayer una pista con el contenido de una pancarta muy ilustrativa poco después del desafortunado: "Decidme que se siente" y mucho después del lamentable: "Mou, tu dedo nos señala el camino". La pancarta iba destinada a Pepe, que no pudo despedirse de su afición en su último partido como madridista. Le podían haber dado las gracias por los servicios prestado, por su compromiso, por su profesionalidad... Pero no, el Bernabéu se autorretrato: "Pepe, orgullo del madridismo", se podía leer.  Y es que el madridismo sintoniza con el que mete el dedo en el ojo y señala el camino a la manada o con el que va por los campos tratando de descuartizar a los rivales, como sucedió con Casquero. Tanto Mourinho como Pepe ensuciaron la imagen del Real Madrid, pero para la afición del Bernabéu, y con la bendición de la directiva, como sucedió con la pancarta de Mourinho que era una apología a la violencia, Pepe encarna esos valores que enorgullecen al madridismo. Pepe es el señorío del que presume el Real Madrid. Pues con su pan se lo coman. Después de esta declaración de amor hacia uno de los futbolistas más sucios de la historia de la Liga española, empezamos a entender por qué la afición del Atlético pone tanto interés en desmarcarse del "señorío" del Real Madrid. Si el señorío lo marca Pepe...