El Comité de Competición ha considerado como de agresión sin consecuencia dañosa la acción de Benítez. Asimismo, ha impuesto castigos de cuatro partidos de suspensión a los también jugadores del Granada Moisés Hurtado, y Siqueira expulsados por Clos Gómez a la finalización de ese mismo choque, y uno a Geijo.
También han sido objeto de suspensión de cuatro encuentros el preparador de porteros Iñaki García y con dos el delegado del Granada, Davi Navarro, quienes en el túnel de vestuarios, según el documento del colegiado, calificaron de "sinvergüenzas" a los integrantes del cuarteto arbitral.
Unos hechos que no tienen nada que envidiar a los protagonizados por el técnico del Madrid, Mourinho, y sus jugadores en diversos partidos de esta temporada y que no han supuesto ni un 10% de las sanciones que les han caído a los componentes del equipo granadino.
El Comité ha mostrado una tremenda inflexibilidad ante estos hechos que tiene a los árbitros como víctima. Perfecto si así lo marca el reglamento, pero no es justo que a acciones como las de los madridistas en diversos partidos tanto o más graves no tengan unas sanciones equiparables.