Joan Tubau
Josep Pedrerol, que lleva semanas intentando influir en la masa social barcelonista para que se cargue a Bartomeu y llegue al club alguien que acepte concederle entrevistas, ha visto cómo nadie ha hecho caso a su llamada al golpe de estado y a la destrucción del actual Barça. El Athletic se puso anoche por delante en el marcador y aparecieron apenas 20 pañuelos en el Camp Nou en señal de protesta. Pocos son para los 55.000 espectadores que poblaban el Camp Nou. "El estadio estaba semivacío", explicaban en un vídeo de este mediodía. Efectivamente, así ven los guiones de Pedrerol la botella del Barça. Se puede ver semillena o semivacía. El lleno se lo guardan al club del ser superior, que siempre acudirá raudo a cualquier petición de entrevista, el vacío, el negativo, el nefasto, siempre es para el Barça.
Por eso, sorprende que en la encuesta que han hecho a los afcionados del Barça en el Camp Nou aparecerieran tantos descontentos y deseosos de que se marche Bartomeu. 20 sobre 55.000 sacaron el pañuelo. Sin embargo, en el guión de Pedrerol son mayoría.
Hoy ha recibido Messi y los medios de comunicación de Barcelona por decir que corrió antel el Athletic. Y reclamaba que hubiera corrido más ante el Madrid. Nada se le oyó hace un año sobre el Real Madrid o Crisitiano Ronaldo, cuando el equipo madridista acabó el año en blanco. Seguramente no dijo nada porque estaría ocupado buscándole les cosquillas al Barça., entonces campeón con 15 puntos de ventaja sobre el millonario equipo del "ser superior".
Ahora resulta que Messi mejoró su juego ayer porque no estaba Neymar. Ya le han encontrado explicación. La culpa es de Neymar. O de Xavi, al que también ven fuera del Barça porque está peleado con Bartomeu y porque "está harto" según su versión. Existe verdadera necesidad de conseguir por la vía rápida la destrucción del Barça. Que se vayan todos, especialmente los más buenos, y que no quede nadie. A ver si así Florentino lo consigue de una vez sin necesidad de recurrir a la independencia de Catalunya para acabar con el Barça e implantar ese dominio hegemónico que prometió y que ha incumplido de manera escandalosa. De eso no habla Pedrerol. No quiere, no puede o no sabe.
Josep Pedrerol debería dedicarse a festejar los triunfos del Real Madrid y olvidarse un poco del Barça. Los hechos confirman que sus soflamas entre sus paisanos no calan. Quizá sea porque al que ya han calado es a él.