Gerardo Martino perdió la confianza de la plantilla pasadas las navidades cuando llegaron los partidos importantes y el argentino dejó de hacer rotaciones. Algunos de los jugadores vieron como sus roles quedaban relegados a un segundo o tercer plano y eso no gustó a todos. Pedro Rodríguez fue uno de los afectados.
El canario estuvo a punto de marcharse al acabar la temporada al Arsenal debido a la situación personal que vivía dentro de la plantilla, ya que consideraba que el técnico argentino le había ninguneado a favor del chileno Alexis Sánchez.
Finalmente, tras la marcha del Tata Martino, Zubizarreta lo consideró intransferible y Luis Enrique se encargó de convencerlo de que tenía un papel muy importante guardado para él esta temporada. Después de eso el canario avisó a sus representantes que pararan cualquier tipo de contacto con otro club y finalmente fue Alexis Sánchez quien se marchó al Arsenal.