Es la imagen del partido, y que manda fuera de la Champions al Barça. En el minuto 91, Gabi intercepta con las manos un centro de Iniesta estando dentro del área. P
enalti clarísimo, pero Rizzoli, el árbitro del partido, la tuvo que liar. El italiano, sin explicación razonable que pueda argumentar,
marcó falta en la frontal del área y no la pena máxima. Todo el mundo vio las manos dentro, pero Rizzoli cayó en el juego del Atlético y las sacó fuera. El conjunto colchonero no ha parado de calentar durante toda la semana el partido de vuelta, y le ha salido redondo. Las quejas por la expulsión de Torres han influido en la decisión del árbitro, q
ue ha sentenciado al Barça eliminándolo de la forma más cruel posible.
La imagen lo dice todo: manos clarísimas dentro
Es imperdonable que en una competición como la Champions League, considerada para muchos la mejor del mundo a nivel de clubes, no esté a la altura en sus arbitrajes y manden a casa a un equipo por estos fallos. Un error de bulto que condiciona y cuestiona la competición. De nada sirve tener hasta seis colegiados dentro del terreno de juego si los fallos siguen cometiéndose.
Robo escandaloso al Barça en el Calderón.