Los jugadores le dan un nuevo disgusto a un Zidane que está "désolé" y cargan de razones a Florentino para que saque el talonario y se ponga a fichar.
Un calco de la anterior eliminatoria ante el Fuenlabrada. Entonces el Madrid resolvió en la ida y se dejó empatar a dos en el Bernabéu por un Segunda B. Esta vez el rival era el Numancia, un Segunda A, pero el resultado ha sido el mismo. A pesar de la conjura en la víspera. A pesar de la bronca de Zidane, de las quejas de los jugadores y del propósito de enmienda de todos, nada ha cambiado respecto al desastre del clásico y el tropiezo de Vigo.
Ni la Unidad A, ni la Unidad B. De los primeros, los titulares, se queja Zidane de que les falta hambre ganadora porque ya lo han ganado todo. Y a los segundos, los suplentes, los de hoy, les exige intensidad y ganas para demostrarle que merecen estar en el once inicial. Pero si los titulares no dieron la talla ni ante el Barcelona ni frente al Celta, los suplentes, en la línea del partido de ida en Soria y de la eliminatoria ante el Fuenlabrada, parecen decididos a cargar de razones a Florentino Pérez para que imponga su opinión sobre la de Zidane, saque el talonario y se ponga a fichar como un desesperado. Zidane ha dicho que no quiere fichajes, ha pactado con sus jugadores que está dispuesto a morir con ellos. Y, con conjuras y broncas incluidas, el paso que llevamos indica un final de funeral. O un cambio de opinión de Zidane aceptando los refuerzos que le propone Florentino.
De hecho hoy los jugadores han desautorizado a Zidane, que no quiere fichajes, y han cargado de razones a Florentino, que tiene el talonario preparado. Pobre favor le han hecho a su técnico, que ha dado la cara por ellos ante el presidente asegurándole que su plantilla no necesitaba ningún refuerzo.
Lo cierto es que hoy el Madrid ha vuelto a fallar ante un Numancia que, de rojo, parecía el Liverpool. Salvo el doblete de Lucas Vázquez -éste nunca falla- y algún detalle de Ceballos, poco más ha ofrecido el Real Madrid a sus incondicionales. Demasiado poco para lo que se esperaba de un equipo que salía a hacerse perdonar por la afición. El Numancia se ha dejado dominar por el Real Madrid y ha contragolpeado con fuerza, ganas y precisión. Jugadas trenzadas, con intención que podian haber emborronado aún más la noche al Real Madrid. Afortunadamente el 0-3 de la ida despejó el horizonte, también sin brillo, porque hoy el Numancia ha sido superior. Al menos sabía a lo que jugaba.
El Real Madrid ha dominado y controlado el partido a lo largo de toda la primera mitad, pero sin generar verdadero peligro ante la porteria de Munir. El gol de Lucas Vázquez en el minuto 10. rematando de cabeza un centro de Carvajal, parecía presagiar una noche comoda para la Segunda Unidad del Real Madrid en quien hoy ha confiado Zidane.
Sin embargo, el dominio del juego del Real Madrid (68% de posesión en la primera mitad) no ha servido para que subieran más goles al marcador y a pocos segundo del descanso una jugada magistral del Numancia, trenzada al primer toque en un contragolpe de libro, ha permitido a Guillermo, que acababa de sustituir a Higinio anotar el empate. El Bernabéu se ha enfadado y ha despedido con pitos a los suyos. Tras el descanso, la misma hisrtoria. Lucas Vázquez ha anotado el 1-2 en los primeros compases y Guillermo ha cerrado el tanteo a poco del final. Entre tanto, el equipo soriano ha desperdiciado numerosas ocasiones que se le han presentado después de plantarse con orden y concierto ante la portería de Kiko Casilla con demasiada facilidad.
Queda claro que las conjuras no hacen efecto ni entre los suplentes que tienen que saltar al campo a comerse la hierba. Se entiende que Zidane esté "desolé". No esperaba esto. Fundamentalmente porque después de lo del Fuenlabrada, Barça y Vigo, los jugadores estaban avisados. Le han vuelto a fallar. Alguno de esos futbolistas que hoy han defendido la camiseta del Real Madrid le soltó a Zidane en la última conjura que no juegan los que mejor entrenan. No sabemos si los que han jugado hoy son los que mejor entrenan, pero jugar, lo que se dice jugar... poco. El Real Madrid tiene una historia y no merece espectáculos como el de esta noche, ante un Segunda División, que confirman que los fichajes son tan necesarios como la lluvia.
Real Madrid: Casilla; Carvajal (Achraf, min.46), Vallejo, Nacho, Theo; Llorente, Ceballos, Kovacic, Asensio (Isco, min.62), Lucas Vázquez y Mayoral (Casemiro, min.77).
Numancia: Munir; Medina (Markel, min.71), Dani Calvo, Elgezabal, Saúl; Grego, Larrea, Dani Nieto, Mateu (Pera Milla, min.66), Nacho e Higinio (Guillermo, min.41).
Goles: 1 - 0, min.10, Lucas Vázquez. 1 - 1, min.45, Guillermo. 2 - 1, min.59, Lucas Vázquez. 2 - 2, min.83, Guillermo.
Árbitro: Munuera Montero (Comité Andaluz). Amonestó con tarjeta amarilla a Casemiro (min.87) en el Real Madrid. Y a Grego (min.18) en el Numancia. Expulsó por doble cartulina amarilla a Dani Calvo (min. 84 y 93) en el Numancia.
Campo: Santiago Bernabéu, 37.553 espectadores.
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