Florentino Pérez sabe que el fichaje de Neymar Jr. es clave para el futuro del club por muchos motivos. El presidente sabe que lo necesita para mantener la hegemonía deportiva pero también para sentar las bases del negocio del club blanco de la próxima década. Cuando Cristiano deje el club, faltará otro crack que acapare todos los focos, tanto dentro como fuera del césped.
La figura de Neymar adquiere una nueva dimensión a la negociar al alza los contratos de patrocinadores, como podrían ser Nike, Fly Emirates y el nombre del nuevo Santiago Bernabéu que está por construir. El fichaje de Ney servirá para dar un golpe de efecto al mercado, un golpe psicológico al Barça y marcar la estrategia para ponerle apellido al nuevo Santiago Bernabéu.
El traspaso del crack del conjunto parisino, de producirse antes del Mundial, debe de suponer un gran impacto para que patrocinadores se animen a ponerle nombre al estadio madridista y por ello se paguen las obras del coliseo blanco antes de la finalización de la gran cita de selecciones.
Con cuatro Champions League en los últimos cinco años y con el mejor jugador actual -Cristiano- y el mejor de la próxima década -Neymar- el Real Madrid mantendría el dominio absoluto en lo futbolístico y en lo económico. Un movimiento clave que Florentino no va a dejar escapar.