Messi se da un recital en Cornellà y deja KO al Espanyol (0-4)

Lionel Messi activó el ‘modo Dios’ en la primera parte, y cuando el ‘10’ se pone así no hay nadie que pueda detenerle. Buena prueba de ello tuvo el Espanyol, que fue un títere en manos del FC Barcelona durante el primer tiempo.

El Barcelona empezó el derbi de Cataluña manteniendo el control del esférico, con calma, buscando siempre la mejor opción sin precipitarse; mientras que el Espanyol cambió completamente sus ideas y pasó de ser un equipo que busca atacar a únicamente defenderse de las acometidas culés y buscar los contraataques. Lionel Messi estaba en su salsa, jugando como si de un entrenamiento se tratara, y rápidamente encontró la recompensa del gol.

En el minuto 17, Lionel Messi aprovechó una falta -que para él era como un penalti- que había provocado él mismo para abrir la lata y anotar el 0-1 inicial en Cornellà. El Espanyol intentó rehacerse, pero lejos de lograrlo, encajó el segundo tanto de la noche minutos más tarde, por medio de una jugada del ‘10’ que convirtió en gol, con un disparo magnifico, Ousmane Dembélé, que también estuvo estelar.

Mientras el Barça buscó el tercero -incluso pudo lograr un hipotético cuarto-, el Espanyol intentó comenzar una posible remontada que no llegó en ningún momento. Pero todavía faltaba el golpe más duro de todos.

Antes de que el colegiado enviara el partido al descanso, Luis Suárez se sacó un gran disparo de la manga para colar el balón entre las piernas de Diego López y anotar el tercer gol de la noche en una acción en la que no tenía ningún ángulo posible para conseguirlo. En Cornellà estaban realmente cabreados, hasta el punto que muchos aficionados abandonaron su localidad -y algunos de los restantes dejaron de pitar a Piqué- para no seguir viendo lo que estaba siendo un recital culé.

Bajó el nivel, pero no peligró el resultado

Tras el descanso, quedó claro que el Barcelona salió pensando que el partido estaba cerrado y los tres puntos ya se habían sumado, y lo cierto es que no estaban equivocados.

El nivel del Barça disminuyó mucho en el segundo tiempo, mientras que creció el del Espanyol, pero no hasta lo suficiente como para recortar distancias pronto y poder meterse en el encuentro. Rubi buscó alternativas, dando entrada al brasileño Leo Baptistao y al español Sergio García, pero su Espanyol no llegaba con peligro a la portería que defendía un Ter Stegen sin demasiado trabajo difícil.

Pasada la hora del encuentro, Lionel Messi certificó el 0-4 definitivo con otro increíble disparo de falta que no pudo detener Diego López. De hecho, el ex portero del Real Madrid se tiró al suelo y se le notó que estaba a punto de llorar de impotencia por la goleada del máximo rival del cuadro perico. El Espanyol logró marcar por medio de Duarte, pero el VAR lo anuló al estar en fuera de juego por unos centímetros.

Ernesto Valverde hizo cambios para dormir el partido, pero poco importaba ya, porque el Barcelona había logrado sumar los tres puntos en un derbi catalán en el que no hubo oposición por parte del Espanyol. Lionel Messi disfrutó (e hizo disfrutar tanto a los culés) que parecía un entrenamiento a puerta abierta… aunque con el paso de los minutos fueron disminuyendo los espectadores.

FICHA TÉCNICA